Continuando con el tema de la eutanasia, les comento, que el ambiente participa de manera importante en el inicio, el mantenimiento y la resolución de los problemas de conducta por los cuales el propietario en muchas ocasiones toma la decisión de aplicar la eutanasia a su mascota. Los estímulos ambientales son los principales factores en reforzar una conducta. Por ejemplo, cada vez que un perro agresivo de manera territorial ladra en la puerta o en la ventana a quienes pasan, el perro está siendo reforzado por la respuesta agresiva cuando los que pasan desaparecen de la vista. En caso de que el propietario no pueda limitar esta conducta, sobre todo cuando el perro se encuentra a solas, el pronóstico para la resolución aminora debido al ensayo continuo del perro (y al reforzamiento concurrente) de la conducta.
Nos hemos dado cuenta de que los rasgos ambientales importantes incluyen la presencia de otros animales, lo cual puede contribuir al problema; niños o personas mayores en la casa, que pueden ser el objetivo de la agresión pueden desencadenar de manera inadvertida el proceso de modificación de conducta; y la ubicación de la casa en general. El propietario debe ser capaz de controlar el impacto ambiental. Si el propietario no puede controlar la exposición de la mascota a los estímulos desencadenantes en ningún grado, entonces el pronóstico para mejorar será pobre.
Hay algunos aspectos de atención rutinaria que se hacen fundamentales para lograr una rehabilitación en problemas de conducta, por ejemplo el hecho de que el propietario pueda caminar con el perro para ejercitarlo y para la defecación, y me refiero concretamente al propietario, no a los servicios de manejadores, paseadores de perros o entrenadores. Saber como se comporta la mascota en el automóvil. Si hay otros animales en la asa que también tienen problemas de conducta o cuya conducta de alguna manera contribuye con el problema de este perro. Por ejemplo, en hogares con varios gatos, a menudo encuentro que más de un gato está marcando- un gato marca y luego el otro marca en respuesta. Cada animal debe ser incluido en el proceso de entrenamiento y, mientras más animales, mayor la carga de trabajo para la familia.
En la próxima entrega los factores inherentes a la mascota.
Reciban un saludo
Nos hemos dado cuenta de que los rasgos ambientales importantes incluyen la presencia de otros animales, lo cual puede contribuir al problema; niños o personas mayores en la casa, que pueden ser el objetivo de la agresión pueden desencadenar de manera inadvertida el proceso de modificación de conducta; y la ubicación de la casa en general. El propietario debe ser capaz de controlar el impacto ambiental. Si el propietario no puede controlar la exposición de la mascota a los estímulos desencadenantes en ningún grado, entonces el pronóstico para mejorar será pobre.
Hay algunos aspectos de atención rutinaria que se hacen fundamentales para lograr una rehabilitación en problemas de conducta, por ejemplo el hecho de que el propietario pueda caminar con el perro para ejercitarlo y para la defecación, y me refiero concretamente al propietario, no a los servicios de manejadores, paseadores de perros o entrenadores. Saber como se comporta la mascota en el automóvil. Si hay otros animales en la asa que también tienen problemas de conducta o cuya conducta de alguna manera contribuye con el problema de este perro. Por ejemplo, en hogares con varios gatos, a menudo encuentro que más de un gato está marcando- un gato marca y luego el otro marca en respuesta. Cada animal debe ser incluido en el proceso de entrenamiento y, mientras más animales, mayor la carga de trabajo para la familia.
En la próxima entrega los factores inherentes a la mascota.
Reciban un saludo
Muy interesantes el tener conocimiento de estos factores y que tienen un gran impacto ambiental
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