Cuando el propietario solicita al médico veterinario aplicar a su mascota la vacuna triple, el facultativo inmuniza a su perro contra tres enfermedades muy importantes: Moquillo, Hepatitis y Leptospirosis. Las dos primeras son bastante conocidas por los propietarios de mascotas, sin embargo la Leptospirosis es bastante desconocida a pesar de ser una enfermedad bacteriana de los perros, que puede tener consecuencias muy graves en las mascotas y que, además, puede contagiarse a las personas.
Esta enfermedad es causada por una bacteria espiroqueta llamada Leptospira, que se encuentra distribuida por todo el mundo. El modo de contagio habitual consiste en la contaminación del agua estancada por la orina de una animal infectado y en el posterior contacto de esa agua con una herida en la piel.
Las ratas constituyen un importante reservorio para el contagio de Leptospira a los perros y, a veces, a las personas. Las ratas apenas se ven afectadas por la enfermedad, pero siguen siendo portadoras durante años y en sus colonias abundan los individuos infectados.
Los perros también pueden contagiar Leptospira a las personas y a otros perros a través de la orina. Tras la infección, muchos se convierten en portadores crónicos sin mostrar aparentemente ningún problema de salud. Esto puede exponer a las familias y a otras mascotas a una enfermedad grave si no se aplica una higiene rigurosa. La enfermedad puede ocasionar en ciertos casos la muerte, tanto a los perros como a las personas.
Mi opinión al respecto es la siguiente:
Debido a los hábitos de comportamiento de los perros como son el olfateo, el lengueteo y el cortejo, al reunirse varios animales se favorece la transmisión intraespecie; siendo los perros "callejeros" una fuente de infección importante para los perros "domiciliados". Considero que es muy importante que aquellas personas que rescatan perros de la calle, tengan mucha precaución, pues fácilmente pueden ser contagiadas, ya que el binomio perros-roedores es una fuente potencial de diseminación de la Leptospirosis.
Por otro lado, la información epidemiológica sobre la leptospirosis canina en México es limitada, no se dispone de un análisis real de la situación, los casos se estudian de manera independiente y la existencia de brotes es desconocida.
La única solución es mantener a las mascotas vacunadas y tener poco contacto con los perros de la calle, una vez que sean adoptados hay que aplicar la vacuna para protegerlos a ellos y a las personas que están en contacto con ellos.
Reciban un saludo